jueves

Maria Montessori

 ¿QUIEN FUE MARIA MONTESSORI? 


Nació en Chiaravalle, provincia de Ancona, en Italia, el 31 de agosto de 1870. Hija única de padre militar descendiente de la nobleza de Bologna que había luchado por la independencia de Italia; y de una madre liberal, católica e intelectual cuya familia se desenvolvía en el mundo de la filosofía, la ciencia y la investigación. 

Con 12 años, María Montessori y su familia se mudaron a la ciudad de Roma, con la intención de asegurar que estudiaría en las mejores escuelas de la época. 

Estando ahí, mostró un interés y una habilidad especial por las matemáticas, así que, pese a los deseos de su padre de que se convirtiera en maestra, Maria Montessori se inscribió en una escuela técnica de ingeniería donde solo asistían hombres. 

Un año después surgió su inquietud por estudiar medicina, con lo cual decidió abandonar la ingeniería e iniciar los nuevos estudios a los 22 años, aun ante la negativa y el rechazo inicial del director, de su padre y de sus compañeros, quienes consideraban que la carrera de medicina era una especialidad que solo podían ejercer los hombres. 

Finalmente, en 1896, a los 26 años, Maria Montessori se convirtió en una de las primeras mujeres médicas de Italia, mismo año en el que fue elegida como representante de las mujeres italianas en el Congreso Feminista celebrado en Berlín, en donde defendió la igualdad de derechos de las mujeres. 

En la misma época denunció la situación que vivían los niños que trabajan en minas en Sicilia, con lo que se sumó a las luchas en contra de la explotación laboral infantil. Tiempo después y motivada por una conciencia de justicia social, comenzó a trabajar en clínicas psiquiátricas y colegios donde principalmente asistían niños y niñas con discapacidad intelectual en condiciones muy precarias. A la par, Maria Montessori había continuado estudiando biología, filosofía y psicología, tanto en Italia como en Francia e Inglaterra. 

Estas son las experiencias que finalmente le permitieron desarrollar el método pedagógico que lleva su nombre. 

¿Cuál fue la primera escuela Montessori? 

Maria Montessori tuvo la oportunidad de crear su propio centro educativo. En enero de 1907 inauguró en Italia la primera Casa dei Bambini (Casa de los Niños -nombre con el que se conoce hasta nuestros días el aula de clases, o ambiente Montessori, destinado a niños de 3 a 6 años-). 

Prestó especial atención a cómo el ambiente estaría preparado, mandó a hacer muebles al tamaño de los niños (lo que en ese momento resultó bastante innovador). Así mismo diseñó material pedagógico adecuado a las edades y los periodos sensibles de los niños y contrató a una profesora como asistente. Juntas comenzaron trabajando con alrededor de 50 niños. 

Maria Montessori continuó observando de manera constante la evolución de los niños y niñas, con lo que pudo seguir desarrollando su método educativo. De la misma forma pudo seguir diseñando actividades y materiales didácticos, pero sobre todo logró fundamentar los principios teóricos y empíricos que hasta nuestros días definen El Método. 

 

Inicios del método Montessori 

En la época que vivió Maria Montessori la medicina estaba fuertemente interesada en encontrar tratamientos e incluso una “cura” a algunas condiciones como la sordera, la parálisis, la discapacidad intelectual, etc. Pero, lo que Maria Montessori observó mientras trabajaba con niños y niñas con dichas condiciones, fue que lo que necesitaban realmente no era la medicina, sino la pedagogía. 

Maria Montessori realizó muchas observaciones en la Clínica Psiquiátrica de la Universidad de Roma, que le llevaron a darse cuenta de que el verdadero problema de que muchos niños y niñas con discapacidad jugarán de formas que parecían socialmente inadecuadas, era que estaban aburridos, porque no tenían materiales didácticos, además de que el espacio en el que se encontraban estaba muy desordenado y sus condiciones eran bastante precarias. 

A partir de ahí, Maria Montessori tuvo la idea de construir un ambiente que fuera agradable, estaba convencida de que las condiciones del espacio y de los materiales eran cruciales para el desarrollo de las habilidades intelectuales y sociales de los niños. En ese mismo momento se enteró de que había dos médicos franceses que habían desarrollado un método educativo en una línea similar, por lo que viajó a París para entrevistarse con ellos  (Jean Marc Gaspard Itard y de Édouard) 

A su regreso, el estado italiano había inaugurado un instituto destinado a potenciar las habilidades intelectuales de las personas con discapacidad, escuela de Ortofrenia, donde María Montessori obtuvo el cargo de directora y continuó como formadora de maestros y maestras, así como profesora de universidad y conferencista en distintas ciudades.  

El método Montessori 

 

El método Montessori se caracteriza por proveer un ambiente preparado: ordenado, estético, simple, real, donde cada elemento tiene su razón de ser en el desarrollo de los niños. El aula Montessori integra edades agrupadas en períodos de 3 años, lo que promueve naturalmente la socialización, el respeto y la solidaridad. 
 
El ambiente preparado ofrece al niño oportunidades para comprometerse en un trabajo interesante, elegido libremente, que propicia prolongados períodos de concentración que no deben ser interrumpidos. La libertad se desarrolla dentro de límites claros que permite a los niños convivir en la pequeña sociedad del aula. 
 
Los niños trabajan con materiales concretos científicamente diseñados, que brindan las llaves para explorar el mundo y para desarrollar habilidades cognitivas básicas. Los materiales están diseñados para que el niño pueda reconocer el error por sí mismo y hacerse responsable del propio aprendizaje. 
 
El adulto es un observador y un guía; ayuda y estimula al niño en todos sus esfuerzos. Le permite actuar, querer y pensar por sí mismo, ayudándolo a desarrollar confianza y disciplina interior. 

La educación Montessori cubre todos los períodos educativos desde el nacimiento hasta los 18 años brindando un currículo integrado. 

El Currículo Montessori  

Desde el nacimiento hasta los 3 años 

Durante los primeros tres años de la vida del niño se sientan las bases para su futuro desarrollo. Montessori denomina a este período como el del "embrión espiritual", durante el cual realiza en la esfera psicológica lo que el embrión realizó ya en la esfera física. Este proceso se logra gracias a la "mente absorbente" del niño que incorpora experiencias, relaciones, emociones, imágenes, lenguaje, cultura, a través de sus sentidos y por el simple hecho de vivir. Estas experiencias de vida dan forma a su cerebro, formando redes neuronales que tienen el potencial de permanecer con la persona toda su vida. En esta etapa del nacimiento a los 3 años, la educación Montessori se concentra en el desarrollo del habla, el movimiento coordinado y la independencia, que le dan confianza al niño, le permiten descubrir su propio potencial y su lugar dentro de una comunidad. 

  

De los 3 a los 6 años 

El currículo en el aula de 3 a 6 años se divide en cuatro áreas de trabajo: 

Vida Práctica: son actividades que apuntan al cuidado de sí mismos, de los demás y del ambiente físico que habitan. Las actividades incluyen tareas que le son familiares a los niños: lavar, lustrar, poner la mesa, arreglo de floreros, etc. También se introducen actividades de "gracia y cortesía" que caracterizan a todos los seres civilizados. A través de éstas y otras actividades, se logra coordinación y control del movimiento y exploración del entorno. Los niños aprenden a realizar una tarea de principio a fin, desarrollan su voluntad, su auto disciplina, la capacidad de concentración y la confianza en sí mismos. 

Sensorial: el niño de esta edad aprende a través de sus sentidos más que a través de su intelecto. Los materiales sensoriales son herramientas para que los niños refinen cada uno de sus sentidos ya que cada uno aísla una cualidad particular: olor, tamaño, peso, textura, sabor, color, etc. En esta edad preescolar en la que el niño recibe excesiva información sensorial, estos materiales le permiten encontrar orden y sentido en el mundo, elevan su capacidad de percepción, favorecen la observación y un sentido de admiración por todo lo que los rodea. 

Lenguaje: cuando los niños entran al ambiente a los 3 años enriquecen el lenguaje ya adquirido. Son capaces de usarlo inteligentemente con precisión, belleza, dándose cuenta poco a poco de sus propiedades. Aprenden a escribir partiendo de los sentidos (el oído, el tacto) y, como una consecuencia natural de esto aprenden a leer. Como una extensión de las actividades de lenguaje, los niños aprenden sobre geografía, historia, arte, música. Estas áreas ayudan al niño a conocer el entorno que lo rodea y a despertar la conciencia en el niño del lugar que ocupa en el mundo; los lleva a sentir respeto y amor por su ambiente, y crea un sentido de solidaridad con toda la familia humana y su hábitat. 

Matemática: los materiales ayudan al niño a aprender y entender conceptos matemáticos al trabajar con materiales concretos que lo conducen intuitivamente hacia conceptos abstractos. Le ofrecen impresiones sensoriales de los números y sientan las bases para el álgebra y la geometría. 

  

De los 6 a los 12 años 

El Currículo en el aula de 6 a los 12 años presenta una visión histórica, evolutiva e integrada del conocimiento y del desarrollo humano. Incluye cinco Grandes Lecciones o lecciones fundamentales a partir de las cuales se desarrollan estudios específicos en distintas áreas. Las lecciones están diseñadas para despertar la imaginación, la curiosidad y la admiración por la capacidad creativa e innovadora del espíritu humano 

Grandes Lecciones 

Desarrollo del Universo y de la Tierra 

Desarrollo de la Vida 

Desarrollo de los Seres Humanos 

Comunicación por Signos 

Historia de los Números 

Estudios específicos 

Astronomía, meteorología, química, física, geología y geografía 

Biología, botánica, medio ambiente, evolución de la vida y zoología 

Historia, cultura, estudios sociales, descubrimientos científicos e invenciones 

Lectura, escritura, lingüística, estructuras del lenguaje y literatura. 

Matemáticas, origen de los números, sistemas de número y geometría. 

 

El Niño  


Para la Dra. Montessori todo educador debe "seguir al niño", reconociendo las necesidades evolutivas y características de cada edad, y construyendo un ambiente favorable, tanto físico como espiritual, para dar respuesta a esas necesidades. El desarrollo del niño surge de la necesidad de adaptarse a su entorno: el niño necesita darle sentido al mundo que lo rodea y se construye a sí mismo en relación a ese mundo. 

Maria Montessori observó que el niño pasa de la infancia a la adultez a través de 4 períodos evolutivos llamados "Planos del desarrollo". Cada período presenta características radicalmente distintas de los otros, pero constituye los fundamentos del período sucesivo. Así "como la oruga y la mariposa son muy distintas en su aspecto y sus manifestaciones y, sin embargo la belleza de la mariposa es consecuencia de su vida en el estado de oruga, y no puede provenir de la imitación del ejemplo de otra mariposa. Para construir el futuro es necesario vigilar el presente. Cuanto más cuidamos las necesidades de un período, mayor éxito tendrá el período siguiente" (La Mente Absorbente, María Montessori, Editorial Diana, 1998, pág. 245). 

 
 

  • El primer Plano del Desarrollo comienza con el nacimiento hasta los 6 años, está caracterizado por la mente absorbente del niño, la cual toma o absorbe todo los aspectos, buenos y malos, del ambiente que lo rodea, el lenguaje y la cultura.  

  • En el segundo plano, desde los 6 a los 12 años, el niño posee una mente razonadora, para explorar el mundo con su imaginación y pensamiento abstracto.  
  • En el tercer plano, de los 12 a los 18 años, el adolescente tiene una mente humanística deseosa de entender la humanidad y la contribución que él mismo puede hacer a la sociedad.  
  • En el último plano del desarrollo, desde los 18 a los 24 años, el adulto explora el mundo con una mente de especialista apropiándose de su propio lugar en él. 

 

El ambiente Montessori 




Es un ambiente preparado, es un lugar amplio y abierto, ordenado, estético, simple, "real", donde cada elemento tiene su razón de ser en el desarrollo del niño. El ambiente es proporcionado a la medida de los niños, con estanterías bajas y distintas medidas de mesas y sillas donde se sientan los niños individualmente o en grupos. El aula está subdividida en áreas temáticas donde se exponen los materiales y la bibliografía correspondientes y permite una gran libertad de movimiento. Los niños pueden trabajar en grupos o individualmente, respetando, de este modo, su propio estilo y ritmo. Cada niño utiliza el material que elige tomándolo de la estantería y devolviéndolo a su lugar para que pueda ser usado por otros. 
 
El ambiente promueve la independencia del niño en la exploración y el proceso de aprendizaje. La libertad y la autodisciplina hacen posible que cada niño encuentre actividades que dan respuesta a sus necesidades evolutivas. 
 
El aula Montessori reúne niños de tres edades distintas: menores de 3 años, de 3 a 6 años, de 6 a 9 años y de 9 a 13 años. Las "salas integradas" favorecen la cooperación espontánea, el deseo de aprender, el respeto mutuo y la incorporación profunda de conocimientos a través del ejercicio de enseñarle a otros. 
 

Material Didáctico Montessori 

 
El material Montessori está diseñado para proporcionar a los niños oportunidades para descubrir el mundo que les rodea, a través del aprendizaje independiente, la repetición y la práctica. Aúna todas las herramientas de aprendizaje basadas en los sentidos. 

Consiste en elementos bonitos, llamativos y fáciles de usar que facilitan la guía de los niños a través del plan de estudios Montessori. El educador Montessori presenta y ofrece a los niños el material Montessori para trabajen con él de manera independiente.  

Los materiales Montessori se presentan al niño en secuencia, de lo más fácil a lo más difícil, de acuerdo con sus necesidades e intereses de desarrollo. Siempre dentro del contexto del resto de objetos a emplear a medida que avancen en el Programa de Educación Montessori. 

Esta secuencia clara proporciona a los niños un camino lógico hacia el aprendizaje que promueve la estratificación gradual del conocimiento para establecer el aprendizaje fundamental. 

  

Ventajas del material Montessori en el desarrollo del niño 

Este material educativo ofrece una serie de beneficios para los niños que presentamos a continuación: 


1. Control del error 

Cada material Montessori está diseñado con un control visual de error. Esto significa que el niño puede ver y corregir fácilmente sus propios errores porque las piezas no encajan entre sí o si queda una pieza fuera.  

Este aspecto de autocorrección también hace que los materiales sean autoinstructivos. Es decir, el niño puede descubrir y dominar los resultados del material a través de la repetición y la práctica, independientemente de la presencia de un adulto. Como resultado, los estudiantes Montessori desarrollan fuertes habilidades de resolución de problemas, resistencia y concentración. 




2. Orden de progresión 



En el aula Montessori, los materiales se muestran en función de la edad del menor y del área específica del plan de estudios. Este último incluye aspectos relacionados con la vida práctica, sensorial, matemática, lenguaje y cultura.  

Cada material se muestra en orden de progresión, de más fácil a más difícil, y de izquierda a derecha. Esta estructura lógica alienta a los niños a organizar su pensamiento, progresar lógicamente a través del programa Montessori y absorber el resultado del material a su propio ritmo. La orientación de izquierda a derecha del material Montessori también ayuda a los pequeños con la preparación para la lectura y la escritura, y la forma en que el cerebro procesa la información de forma natural. 

  

3. Habilidades motoras finas 



Además de enseñar a los niños áreas de conocimiento y habilidades concretas, el material didáctico Montessori también resulta beneficioso para desarrollar las habilidades motoras finasMaria Montessori entendió que el desarrollo motor fino es un aspecto crucial de la educación de los niños debido a su vínculo con la forma en que los pequeños llegan a comprender su mundo.  

La metodología inicial de aprendizaje de un niño es a través de sus manos. La incorporación de las habilidades motoras gruesas y finas es crucial para un enfoque equilibrado en la educación infantil, incorporando aspectos sociales, físicos, mentales y emocionales del desarrollo infantil. Por lo tanto, muchos materiales Montessori fomentan el desarrollo de estas habilidades desde una edad temprana. Al permitir que los niños experimenten el aprendizaje a través de sus sentidos, los materiales Montessori les enseñan a convertirse en aprendices independientes y motivados, con las habilidades necesarias para prosperar. 

¡¡Juguemos!!

  Cuando el cerebro debe organizar todas estas sensaciones si la persona debe moverse, aprender y comportarse normalmente. Cuando las sensa...